Hola chic@s, ya van empezando a cambiar las temperaturas y dejamos el verano atrás, volvemos a las rutinas y una de ellas (aunque no debemos abandonarla en el verano) es el cuidado de nuestra piel. El objetivo de dicha rutina es conseguir tener la piel sana y bonita, es cierto que la genética pesa mucho, pero podemos ayudar a nuestra genética a tener una buena piel, sin manchas, con la menos arrugas posibles y luminosa.
Si ya has pasado de los 30, es recomendable añadir a la rutina diaria un serum y usar ya cosméticos antioxidantes que nos ayuden a retrasar los efectos de la edad. Con el paso de los años la piel sufre cambios en su estructura que se traduce a la vista en arrugas y alguna mancha a causa de la disminución de los fibroblastos y de la síntesis de colágeno y elastina. Otra consecuencia de la edad es que la piel se ve más seca y apagada ya que la regeneración cutánea se ralentiza.