Hola chic@s, seguramente como yo, os habéis preguntado que quitaesmalte es mejor, si con acetona o sin acetona, por eso hoy he pensado en hacer una breve entrada donde dejar claro como es cada uno y algunos consejos y recomendaciones.
El quitaesmalte con acetona contiene ese disolvente que es muy potente ya que elimina el esmalte rápida y eficazmente, incluso esmaltes oscuros, con purpurina, semipermanentes o gel. ¿Cuál es su ventaja?, la rapidez y alta efectividad. Es perfecto para esos esmaltes muy oscuros y resistentes o para uñas acrílicas. Pero tiene un inconveniente y es que reseca uñas y cutículas y puede causar descamación y debilitamiento si se usa con frecuencia. Tiene un olor muy fuerte y si tienes la piel sensible puede ser agresivo para tu piel.
Por otro lado, el quitaesmalte sin acetona usa disolventes más suaves (como acetato de etilo) y suele incluir ingredientes hidratantes (glicerina, aceites). A la hora de su eficacia es más lento y menos potente, especialmente con esmaltes muy pigmentados o semipermanentes. Su ventaja es que es mas suave con las uñas y la piel, si tienes uñas frágiles, secas o dañadas es más adecuado. También sin duda el olor es una ventaja ya que es más agradable. Sus desventajas claramente son que se tarda más en eliminar el esmalte y que hay esmaltes que es posible que no consiga eliminar del todo.
